Si has tenido hijos que se llevan muy poquita edad, sabrás lo importante que es que ambos estén equilibrados, que se sientan queridos y que juntos descubran lo mejor de cada momento, por ello intenta siempre hacerles ver lo importantes que son para ti. Enséñales y explícales lo mismo y sobre todo, ten paciencia.
Ambos querrán llamar tu atención y reafirmarse hablándote a ti, por ello sé veloz en tu respuesta y no des información a tontas y a locas, si a uno le compras un juguete, asegúrate de que al otro tampoco le falta, es decir, apremia a ambos por igual cuando hagan las cosas bien.
No felicites por actos equivocados y tampoco les permitas que sean caprichosos e intolerantes. El aceptar desde pequeños responsabilidades, les ayudará a comprender lo que es crecer poquito a poco en una sociedad consciente y madura. Tan sólo compartiendo en familia, se darán cuenta de lo valiosa que es.
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