Los antibióticos son uno de los medicamentos modernos que más usos tienen para combatir las enfermedades, pero por desgracia el organismo termina por presentar resistencias a estas sustancias y esto supone un problema general para la humanidad, ya que los efectos beneficiosos dejan de afectarnos y por tanto no podemos combatir ciertas enfermedades.
Siempre se han buscado alternativas al uso de antibióticos para evitar que nuestro organismo cree resistencia y por otro lado, el creciente efecto inmune que tanto bacterias como microorganismos están desarrollando frente a ellos. Por suerte, un equipo de científicos de la Universidad de Berna en suiza, han elaborado una sustancia que no posee antibióticos y que es capaz de luchar contra las infecciones más graves producidas por las bacterias.
En pocas palabras, se trata de un cebo artificial para toxinas bacterianas y actúa como un señuelo para atrapar las toxinas, neutralizarlas y eliminarlas de nuestro organismo. De este modo las bacterias pierden sus toxinas y pueden ser eliminadas por el sistema inmune sin ninguna dificultad.
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